La historia de la Coca-Cola

La historia de la Coca-Cola

Corría el año 1886, y el farmacéutico John S. Pemberton, de la norteamericana ciudad de Atlanta, tenía la obsesión de conseguir inventar un tipo de jarabe que además de ser medicinal, fuera agradable al paladar e incluso refrescante. Realizó numerosos y extraños experimentos, ensayos y pruebas en su rebotica, donde probaba mezclando varios ingredientes. Probaba nuevas sustancias y experimentaba con cuanto pudiera servir a su propósito.

 

El 8 de mayo de 1886, descubrió una fórmula novedosa: extracto de nuez de cola, hojas de coca, azúcar y una pequeña cantidad de cafeína junto a extractos vegetales cuya composición se negaba a revelar. De hecho, la fórmula de la Coca-Cola era más compleja. Era una bebida refrescante sin alcohol a base de jarabe de almidón en cuya composición entraban a formar parte sustancias vegetales, extracto de hojas de coca descocainadas, caramelo, nuez de cola, azúcar y agua filtrada.

 

Pemberton no parecía dar importancia a su mezcla. Pero, en cierta ocasión acertó a probarla un vendedor amigo del boticario. Al servir aquel jarabe de sabor dulzón llamado ya Coca-Cola lo mezcló con soda, y tanto gustó que en aquel mismo instante quedaba definitivamente creada la popular bebida.

 

El toque maestro era esa última adición: la soda, inventada siglo y medio antes por el inglés W. Browning inyectando ácido carbónico en un recipiente de agua mineral. Pemberton hablaba del novedoso producto como de un refresco tonificante, aunque no parecía convencido de la importancia del hallazgo, ya que un año después vendió la fórmula a su colega el médico y boticario A. Griggs Candler, también de Atlanta, fabricante de refrescos.

 

Candler mejoró el proceso de elaboración y comercialización de la bebida y en 1919 se aseguró la propiedad del negocio completo iniciando la gran expansión comercial de la compañía que aquel mismo año emprendía su andadura europea convirtiendo Coca-Cola en una de las empresas del ramo más importantes del sur de Estados Unidos primero, y del mundo después.

 

Tan importante llegó a ser la firma en los primeros lustros del XX que en 1919 la vendió por veinticinco millones de dólares.

 

Ya existía su envase característico: la famosa botella destinada a recorrer el mundo de éxito en éxito, al principio de una en una, y a partir de 1923 en cajas de seis unidades con el famoso reclamo publicitario: Serve Coke at Home (ponga Coca-Cola en su casa). También existía ya la flotilla de camiones Ford modelo “T” para el reparto de las Coca-colas, con su vistoso color amarillo.

 

Después de sacar al mercado diferentes versiones de Coca-Cola ( Coca-Cola sin cafeina 1983 y Coca-Cola Light 1985), el mayor cambio realizado por la The Coca-Cola Company tendría lugar el 23 de abril de 1985 en que se lanzó la New Coke o nueva Coca-Cola, que cambiaba la fórmula original.

 

Este hecho supuso un escándalo y hubo incluso protestas populares masivas, por lo que la compañía se vio obligada a volver a fabricar la Coca cola con la fórmula tradicional de 1886, la del viejo boticario de Atlanta mister Pemberton.

 

Poco después se empezó a comercializar la variedad Cherry Coke  con sabor a cereza y en 2006 lanzó Coca Zero parece que en general ha tenido una buena acogida por parte del mercado internacional y sus cifras de consumo aumentan cada año. Sacándose al mercado también la Coca-Cola Zero Sin Cafeína o también conocida como Coca-Cola Zero Zero.

 

FUENTE: curiosfera-historia.com