¿Por qué la contabilidad te ayuda a que tu empresa mejore?
Porque el dinero es una de las máximas preocupaciones, y la verdad es que hay muchas opciones para tener el dinero mejor controlado.
Cuando conocemos los principios básicos de las finanzas se puede mejorar el resultado de la empresa, porque se puede interpretar, tener la información clave nos servirá para tomar mejores decisiones.
La contabilidad nos va a decir si el margen es bueno, si lo he cobrado, si tengo fondo de maniobra suficiente para aguantar, te permite meter “el dedo en la llaga”. Te permite conocer las áreas que están agregando menor valor y las que están haciendo los mayores aportes. Sobre esa base, puedes tomar medidas para corregir el rumbo. La contabilidad bien llevada “aleja” a la administración tributaria de tu empresa. Una empresa que cumple puntual y coherentemente con sus declaraciones e impuestos, es una entidad que tiene menos probabilidades de ser inspeccionada.La empresa está llena de situaciones en las que intervienen la contabilidad y las finanzas, aunque estemos especializados en otras áreas de la empresa, como el marketing, los recursos humanos, las operaciones o la dirección general.
El marketing por ejemplo depende de conceptos como el presupuesto de publicidad, los gastos de ventas o las ventas. La gestión de recursos humanos está muy influenciada por los salarios o la inversión en formación. La marcha de las operaciones precisa de inversiones que hay que decidir y financiar. La dirección general tiene que conseguir que la empresa genere beneficios y tesorería para poder pagar todos los compromisos y retribuir a los accionistas de la manera adecuada.
La contabilidad y las finanzas son herramientas imprescindibles para gestionar correctamente la empresa y evitar errores que pueden costar muy caros. De la misma forma que las personas debemos hacernos un chequeo médico
a menudo para evitar problemas, las empresas tienen que ser objeto de un diagnóstico financiero periódicamente.
El análisis de la empresa permite conocer cuál es su situación financiera y su capacidad para generar beneficios. Una vez se conoce la situación en que se encuentra la empresa se pueden tomar las medidas correctivas que permitan mejorar los problemas.Una vez controlados los números, los cuadros de mando con los indicadores clave de la empresa nos pueden ayudar a mejorar nuestra gestión y a partir de aquí planificar, tomar decisiones, marcar el rumbo.
De la mano de un asesor todo será más fácil.